domingo, 12 de abril de 2020

Palabras

La personas y su mala comunicación están condenadas. Nada más muerto que gente tomando decisiones arbitrarias, vanagloriándose en su ignorancia, mirando bajo del hombro a todo aquel que piensa distinto o siquiera se atreva a cuestionar su falso razonamiento. En un mundo donde el fondo fue superado por la forma la persona con mejor allegada social tendrá siempre aprobación. Y aquellos que no, siempre podrán unirse a otros patanes, subirse en hombros los unos a los otros y decir que son altos, llegar al sol y taparlo con un dedo. Mientras exista la frivolidad en la cultura existirá búsqueda de aprobación social, y mientras eso suceda también existirá la autocompasión en el corazón de los hombres, un exceso repudiable de autocompasión, de manipulación, de lágrimas falsas, de dolor de estómago disfrazado de intoxicación letal, todo orquestado para volverse a sí mismos y decir que han logrado todo en sus miserables vidas.

Aquel que domina el lenguaje domina el pensamiento, y aquel que no, tropieza torpemente intentando encontrar la palabra que define bien sus sentimientos, cayendo en malentendidos ridículos que sonrojarían al estudiante más novato. Una lástima que nadie haga reparo en lo superficial que se volvió el mundo. En lo muerto por dentro que se encuentra.

Julian Bosch

lunes, 16 de marzo de 2020

Poema: Otoño (2015)

Fue en Otoño el tiempo
En que me enamoré de ella
Hoy no la amo, más sin excepción
y cada que cae la estación,
Recuerdo el tiempo
En que me enamoré de ella


 Julian Bosch